martes, 12 de febrero de 2013

TODO EL MUNDO HACIENDO LA TAREA

Foto: @JaVKa 

TODO EL MUNDO HACIENDO LA TAREA

La experiencia vivida el pasado domingo 10.02.2013 en las graderías del Templo Sagrado del fútbol venezolano Pueblo Nuevo, fue digna de esas tardes-noches memorables que hacen de ese recinto algo más que una inmensa mole de concreto. Se patentizó un carnaval de fútbol, goles, gramado inmejorable, frío que baja de la montaña, alegría, hinchada y familia que ratifican que ese estadio tiene vida y luz propia, como pocos estadios del mundo tienen.

Los convocados eran -por la visita- el equipo platanero con necesidades muy claras de alejarse de la zona de descenso por una parte; y por la otra, un carrusel aurinegro ya ambicionando dejar atrás su sombría reciente historia y ratificar el por qué es uno de los llamados a jugar la final en mayo del 2013 con el DANZ, observada la inversión y el proceso activado por la crisis deportiva e institucional de los tres últimos torneos cortos.

Foto: Golfredo Vivas
Fueron cuatro goles propinados al Atlético El Vigía, oncena que sí la verdad merece ser dicha, complicó los primeros 45´ más de lo que nadie hubiese podido pensar, comparando lo que en el papel representan ambas nóminas. Pero el fútbol no son nóminas, ni nombres rimbombantes; hay que demostrar la jerarquía desarmando deportivamente al rival con una excelente propuesta de táctica; fútbol que ni siquiera debe austero por el contrario debe concluyente.

El gozo que Giancarlo Maldonado le aporta con su sola presencia a las gradas se revalidó con el cobro de una pelota detenida a la que muchos plantean contó con el complot del arquero merideño, lo cierto es que, con error o no, el balón iba con tal efecto venenoso bastante y suficiente para llevar dirección arquería adentro, lo que trajo el 1 a 0 e irse el local a camerinos ganando ajustadamente.

        Arrancando el segundo tiempo, Deportivo Táchira se decidió resquebrajar el férreo mediocampo visitante y propuso más fútbol, en ese momento es cuando el juvenil Andrés Ponce forzó un tiro de esquina permitiendo que la nueva incorporación Grenddy Perozo por segunda vez y en rebote mandara a sacar a la visita de la mitad de la cancha (50 m´).

Si el capitán Andrés Rouga, de quien estos días todos piden eleve el rendimiento deportivo que de él se sabe posee y se puede esperar, este domingo ratificó tal despegue, con un remate y un práctico gol al minuto 68  con un amague a doble paso terminando con la esférica en las redes visitantes para ya sellar la goleada. Esto obliga al “profe” Farías hacer cambios en el medio campo para cuidar el resultado refrescando líneas y consolidar el valioso cero del arco protegido por el portero local Bréiner Castillo.

Ni con el 3 a 0 los dirigidos por Ramón Hernández bajaron los brazos, igual no contaban con que el tachirense y mundialista Mauricio Parra, al 74´ levantase la mirada, viendo el espacio milimétrico y bañase al arquero vigíense que sólo atinó  levantar los brazos propinando el cuarto gol de los dueños de casa. En semejante escenario ya era obligado que la Avalancha Sur encendiera los fuegos artifíciales al cielo del engramado de Pueblo Nuevo y la fiesta fuera sellada.

        Todos parecen tener claro que de aquí en adelante sólo le vienen finales al atigrado de la frontera, la próxima semana la cita es con un respetable  Mineros de Guayana, equipo que también legítimamente sueña y aspira con el Clausura 2013, pero los de Farías, parecieran estar haciendo sus tareas y deberes a tiempo con la seriedad necesaria y por las declaraciones del técnico posterior al juego, aún “no le agrada del todo como juegan sus dirigidos”. A pesar de minutos antes ganar 4 a 0.

Cosas de los estrategas.

        Se respira en todo el estado Táchira y más allá de sus fronteras unas serias ganas de hacer las tareas y deberes. Ya bastante sufrió la hinchada con el pasado reciente vivido y junta directiva, hinchada, jugadores, cuerpo técnico, autoridades locales y medios de comunicación, en comunión, parecieran todos alinearse en pro del proceso que se han fijado, no siendo otro que sacar al equipo más popular de Venezuela como campeón por octava vez, y; de ser posible a la par, exhibirse orgullosos ante las autoridades de la Federación Venezolana de Fútbol como una sede propicia y segura para volver a recibir en su seno a la Selección Vinotinto.

Ojalá así sea.